“La basura de un hombre puede ser el tesoro de otro”. Esta frase, que parece provenir del siglo XIX y que en su origen hacía alusión al valor de los cuentos y las fábulas, es ahora uno de los lemas principales de los mercadillos de segunda mano o ‘flea markets’ en inglés, una tendencia cada vez más presente en los barrios de Barcelona y, por supuesto, en nuestro Casc Antic.
Hay quien achaca el florecimiento de esta moda del reciclaje y a la segunda mano a la crisis económica que desde hace años azota nuestro país. Puede ser. sin embargo, lo cierto es que este tipo de mercados han existido desde tiempos remotos en muchísimos lugares del mundo y, si indagamos un poco en la historia, podemos remontarnos hasta finales del siglo XIX, cuando se tiene constancia del primer mercadillo norteamericano, en Texas, donde la gente aprovechaba el comercio de caballos para llevar también sus cosas y venderlas o intercambiarlas.
Y es que ésa es, en definitiva, la cultura de los ‘flea market’ o mercadillos de segunda mano: no hay nada que no se pueda vender o, en otras palabras y volviendo a la frase inicial: lo que a uno ya no le interesa, puede ser el objeto más deseado de otra persona. En Barcelona, decíamos, el número de mercadillos de segunda mano ha ido creciendo con el paso de los años auspiciados, también hay que decirlo, por la fiebre o moda retro vintage entre la gente joven. El número de mercadillos es cada vez mayor y, junto a los más importantes, surgen iniciativas de grupos o asociaciones que organizan este tipo de encuentros. Nosotros, hoy, queremos hacer una breve presentación de algunos de los mercadillos que podemos disfrutrar en los barrios de nuestro Casc Antic:
En el Raval
Quizás el más conocido sea el el Flea Market, con casi 200 puestos, y que se ha convertido en un referente para todo aquel que quiera rentabilizar su vestuario: toda la ropa es de segunda mano. Este mercadillo, que se celebra cada segundo domingo del mes en la plaza de Blanquerna, en la zona sur del barrio del Raval, comenzó celebrándose en casas y sótanos entre amigos durante el 2007, y desde entonces no ha parado de crecer.
También en el Raval se celebra cada primer sábado de mes el Rastro de la Virgen, organizado por la asociación cultural Arco de la Virgen, en el carrer de la Verge (cerca del CCCB) y donde se puede encontrar arte reciclado, ropa y objetos de segunda mano.
No nos salimos del barrio porque en la calle de la Riera Baixa, como ellos mismos dicen, te encontrarás con un río de cosas: “Nuevas tendencias y viejas aficiones se dan la mano en este rincón del centro de Barcelona, donde se mezclan también las tribus urbanas con las etnias que hacen del Raval el barrio de la diversidad y el alma de la tolerancia de esta ciudad”.
Uno de nuestros favoritos es el mercado social demanoenmano, una propuesta itinerante, que se celebra de forma mensual en distintas localizaciones de la ciudad de Barcelona: el Convent de Sant Agustí, el Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona, la Estació de França, o la Universitat de Barcelona, normalmente. Como ellos explican en su página web, en este mercadillo se suman dos iniciativas: la primera dedicada al reciclaje, la segunda mano, el coleccionismo y el vintage, y la segunda a las nuevas creaciones de artistas y artesanos de cualquier disciplina (diseñadores, pintores, fotógrafos, escultores, ilustradores…).
El Borne
En el barrio de El Borne nos encontramos con el BLBCN (Brick Lane Barcelona), que hace referencia al famoso barrio londinense donde se celebra uno de los mercados más importantes de la capital inglesa, el Brick Lane Market, en el que cada domingo miles de personas se concentran para buscar entre los tesoros de otras personas. Aquí, en Barcelona, el Brick Lane se celebra en Calle Princesa.
El Gótico
Si te gusta lo vintage, pero lo que te interesan son las antigüedades, entonces no te puedes perder es el Mercadillo de Antigüedades o Mercat Gótic, que se celebra en la Plaza de la Catedral de Barcelona, en el barrio Gótico. En la treintena de puestos que lo componen y que se reúnen todos los jueves, uno se puede encontrar desde una colección de planchas de hierro o molinillos de café antiguos, a las clásicas muñecas de porcelana, vajillas, cuberterías y artículos de menaje para el hogar.
Lost and Found
Imprescindible a la hora de hablar de mercadillos es el Lost & Found, uno de los flea markets más conocidos en Barcelona. Aunque no cuenta con tantas ediciones, es uno de los más grandes y suele hacerse en la Estació de França, en la Barceloneta. Se celebra cuatro veces al año y cualquier persona puede participar aportando sus objetos personales como libros, ropa, música, cómics, productos informáticos, juguetes, ideas, conocimientos… Es necesario inscribirse en su página web: Lost & Found
Y, por supuesto, no podemos terminar este artículo sobre mercadillos sin mencionar nuestro histórico Mercat de Sant Antoni, especializado en coleccionismo, y en el que los amantes de los libros de segunda mano tienen una cita todos los domingos.
Obviamente no hemos mencionado todos los mercadillos de segunda mano de Barcelona, ni hemos hecho referencia a las muchísimas tiendas que tiendas, bares y grupos muy diversos que se organizan para montar mercadillos con cierta periodicidad. Hay mucho por descubrir en Barcelona…