Barcelona es una ciudad cada vez más atractiva tanto para turistas como para personas que deciden establecer en ella su residencia. Es una ciudad que sigue creciendo y que se ha convertido en un referente mundial como uno de los mejores lugares para vivir y hacer negocios. Si a esto se le suma su ubicación privilegiada, al lado del mar, y su clima moderado durante todo el año, el resultado es una demanda cada vez más alta de viviendas para alquilar. Esto, lógicamente, tiene unas consecuencias: cuando la demanda es más alta que la oferta, los precios del alquiler suben.
Según datos de idealista, los alquileres en Barcelona se han disparado un 37,2% desde mayo de 2015 y el precio de venta ha crecido un 25,22%. Esto, si bien no es del agrado de muchas personas, no parece tener una solución inmediata ya que es un efecto de la ley de oferta y demanda que se repite en todas las grandes ciudades del mundo como Londres, París, Roma, Berlín, Nueva York, por citar sólo algunas.
Los jóvenes prefieren alquilar
También a esta alta demanda responde el hecho de que alquilar es la opción preferida de los jóvenes quienes, por el momento, no se animan a comprar vivienda debido a la inestabilidad laboral que padecen muchos de ellos. Al alquilar una casa, no sólo se evita adquirir un compromiso con una entidad bancaria sino que, además, resulta más fácil seleccionar la zona donde se quiere vivir. Vivir, por ejemplo, en el centro de una ciudad cosmopolita como Barcelona significa entrar en contacto con personas de cualquier parte de Europa y del mundo, además de poder disfrutar de todo tipo de servicio para tener una alta calidad de vida: transportes, servicios para el ciudadano, bibliotecas, centros culturales, parques, mercados y tiendas de todo tipo para que nunca falte lo necesario para vivir.
Alquilar, por tanto, ya no es un medio, sino un fin para muchas personas. Hay quien tiene claro que quiere vivir de alquiler toda su vida. No obstante, pese a la escalada, el alquiler en España aún está lejos de los niveles de otros países europeos -donde llega al 50%-, aunque se va acercando a la media de la Eurozona -el 30%-.
Más consecuencias de la alta demanda de alquiler en Barcelona
Cuando la demanda supera a la oferta, no sólo suben los precios. La competencia para alquilar las mejores viviendas en Barcelona también crece y si antiguamente se tardaban días o semanas para alquilar una vivienda en la Ciudad Condal, en la actualidad, las viviendas más atractivas, esto es, aquellas que gozan de buena ubicación, precio y calidad, pueden alquilarse en cuestión de horas. Por eso es importante recurrir a inmobiliarias profesionales, que sepan seleccionar al mejor inquilino, con las mayores garantías de cobro y, sobre todo, que ofrezca tranquilidad y seguridad tanto al propietario como a la persona que quiere alquilar la vivienda.
En Casc Antic BCN. tenemos más de 30 años de experiencia en el alquiler de viviendas y nuestra estrategia se centra en la especialización en la zona del casco antiguo, Poble Sec y Sant Antoni de Barcelona, donde contamos con oficinas de atención al cliente desde la que podemos asesorarles.